¿DETRÁS, O SOBRE EL TRONO?

Si el Ministerio Público ejerciera su autonomía, por notitia criminis, se abriría de inmediato una investigación, y de encontrarse indicios suficientes, se les imputaría cargos a los presuntos delincuentes, aún cuando se tratara del mismísimo Presidente de la República.

Y si la Asamblea Nacional cumpliera sus funciones, debatiría la infinidad de casos de corrupción que se denuncian por las redes sociales, sancionando políticamente a los involucrados, en caso de ser funcionarios públicos, y solicitando al Ministerio Público, averiguación penal tanto para los funcionarios, como también para los delincuentes particulares que pudieran estar inmiscuidos.

Recordemos que en la llamada democracia representativa, la Fiscalía General de la República logró que la Corte Suprema de Justicia (actual TSJ), hiciera preso y destituyera a un Presidente de la República en ejercicio, por presuntamente haber incurrido en delitos contra la nación Pensará alguién que hoy en día los Poderes Públicos actuarán conforme a la Constitución y las Leyes para hacer justicia una vez investigada la publicación anónima que circula copiosamente en los correos de CANTV, asi como las decenas de denuncias de corrupción que diariamente publican los medios de comunicación.

Los Poderes Públicos han sido penetrados por delincuentes y son éstos quienes los controlan. La delincuencia se ha entronizado en el poder carcomiendo las Instituciones y colocándolas a su servicio, La delincuencia no tiene color político, se interna en los partidos para lograr sus criminales propósitos contra el patrimonio de todos los venezolanos.

Ningún partido político tiene en sus postulados la corrupción y la delincuencia como factores para desarrollar al país y lograr el bienestar de la población, pero cuando la corrupción y la delincuencia se apoderan de un partido político, tienen en sus manos la herramienta ideal para apropiarse de la riqueza del país, llevando a la población a la mas espantosa miseria.

Las Reservas morales y éticas del país están intactas y tienen su expresión en la inmensa mayoría de los ciudadanos venezolanos, están regados por todas partes, dentro de los partidos oficialistas, dentro de los partidos de oposición, dentro de los independientes, dentro de las instituciones públicas, dentro de las empresas públicas o privadas, en el barrio, en la urbanización, en el líceo, en la Universidad, en el Sindicato, en el Gremio Profesional, en la Asociación de Jubilados, en la Fuerza Armada Nacional, en la Sociedad Venezolana.

La verdadera guerra estará protagonizada por la Reserva Moral y Etica de Venezuela, representada en la inmensa mayoría de los ciudadanos, en contra de la corrupción y la delincuencia, enquistada en los Poderes Públicos de la Nación, que representan a una mínima casta que se reparte a su saber y entender la riqueza que pertenece a todos los venezolanos. 

Somos la inmensa mayoría del país, tenemos derecho a vivir dignamente y el deber de derrotar a los corruptos y delincuentes estén donde estén.                                                                                                                                                                                                                                                 l                                                  POR:Agustin Rodriguez                                                                                                                                Sec.Ejecutivo de Fetrate